Amor y odio por los anuncios de Twitter, fracaso de Google, búsquedas peligrosas y una gran filtración de datos. Resumen de AdGuard
En esta edición del resumen de noticias de AdGuard: Google fracasa en su intento de reinventar la publicidad dirigida; Twitter decepciona a sus clientes y critica sus propias políticas; hackers siguen explotando los anuncios en motores búsqueda; y la mala suerte de un gigante de las telecomunicaciones (por octava vez).
Se cuestiona que Google sustituya las cookies de terceros
La discutida iniciativa Privacy Sandbox de Google recibió un duro golpe. El Grupo de Arquitectura Técnica (TAG) del W3C llegó a la conclusión de que la empresa no logró su objetivo de permitir tanto la publicidad dirigida como de proteger a los usuarios del rastreo y de la elaboración de perfiles.
El grupo se centró en un elemento concreto de la propuesta, el API Topics, pensado como sustituto de las cookies de terceros. En su evaluación de Topics, TAG señaló que esta tecnología sigue permitiendo al navegador compartir información sobre el comportamiento online de los usuarios. Además, los datos se "recopilan y envían en secreto", mientras que los usuarios no tienen "ningún control preciso" sobre lo que estos datos revelan sobre ellos, afirma el grupo. La alternativa propuesta a las cookies de terceros surge para "mantener el statu quo de la vigilancia inadecuada de la web", dijo TAG al recomendar que Google no siguiera adelante con esta tecnología. Google no está de acuerdo con estas conclusiones e insiste en que Topics supone una mejora significativa con respecto a las cookies de terceros.
El TAG es un grupo especial que trabaja en el centro del World Wide Web Consortium. Tim Berners-Lee, el inventor de Internet, toma parte en este grupo.
Llevamos mucho tiempo sosteniendo que Google no tiene buenas intenciones con su Topics API. En nuestra propia evaluación en profundidad del Privacy Sandbox, argumentamos que Topics seguiría permitiendo a los gigantes tecnológicos crear perfiles de los usuarios y su único efecto sería reforzar aún más el monopolio de Google sobre la publicidad.
"El fin de una era": Twitter prohíbe los clientes de terceros
Elon Musk, CEO de Twitter, puede estar ocupado con su implicación en una demanda, pero eso no implica una pausa en las noticias relacionadas con Twitter.
Twitter actualizó recientemente sus condiciones para desarrolladores con intención de prohibir las aplicaciones de terceros, rompiendo así con su antigua política. Cuando se le preguntó sobre el cambio, Twitter dijo que sólo estaba "aplicando las normas de su API". El socio cliente más antiguo de Twitter, Twitterriffic, que llegó a iOS incluso antes que la propia Twitter, se ha visto obligado a retirar sus aplicaciones de las tiendas de iOS y Mac. En un post en su blog, Twitterrific dijo que el "repentino e injusto fin de la colaboración" fue provocado por un cambio de política no anunciado en un "Twitter cada vez más caprichoso"..
La prohibición representa un giro en el trato que Twitter da a sus clientes de terceros: antes, Twitter los toleraba. La medida también indica que el Twitter de Musk está dispuesto a hacer todo lo posible para aumentar los ingresos publicitarios del gigante tecnológico. Los usuarios de clientes de terceros "no ven los anuncios de Twitter".
El hecho de que Twitter apueste fuerte por los anuncios y no deje alternativa a los usuarios tiene sentido desde un punto de vista empresarial. Para los usuarios, mientras tanto, eso es preocupante. Los rumores de que Twitter planea obligar a los no suscriptores a compartir su ubicación y número de teléfono con fines de publicidad dirigida contribuye en gran medida a este tipo de preocupación.
Las promesas de Musk de acabar con los anuncios molestos fomentan la creación de un plan sin publicidad de Twitter
Para calmar los temores de algunos, Musk recurrió a Twitter para afirmar lo obvio: "Los anuncios son demasiado frecuentes y demasiado grandes en Twitter", escribió el CEO. A continuación, prometió tomar medidas para solucionar el problema "en las próximas semanas", así como lanzar una suscripción con "cero anuncios" por un precio más elevado.
No es la primera vez que Musk sugiere una suscripción sin publicidad. El mes pasado, el CEO dijo que el nuevo plan sin publicidad se lanzaría a finales de año. Actualmente, los suscriptores de Twitter Blue pagan 11 dólares al mes (si adquieren la suscripción a través de Android o iOS) u 8 dólares (si la compran a través del navegador) para ver la mitad de anuncios que un usuario normal.
La introducción de un plan sin anuncios en Twitter es un paso bienvenido y un motivo de celebración para aquellos que se cansaron de demasiados anuncios, pero no lo suficiente para renunciar a Twitter. Todo dependerá del precio. Podemos ver que Twitter está intentando encontrar un equilibrio entre las demandas de sus anunciantes y sus usuarios, y sólo podemos esperar que la publicidad no se lleve la palma.
La búsqueda en Google está infestada de anuncios maliciosos, según investigadores
Los delincuentes de Internet utilizan cada vez más los anuncios de Google para atraer a los usuarios a sitios de malware, descubrió BleepingComputer. Estos sitios web falsos suelen parecerse a los de empresas legítimas conocidas por su software de código abierto.
BleepingComputer llevó a cabo la investigación después de que a un popular influencer le robaran todas sus inversiones en criptomonedas como resultado de un esquema de fraude. Los investigadores descubrieron que, en algunos casos, los hackers conseguían imponerse a los desarrolladores legítimos apareciendo en los primeros puestos de las búsquedas, por encima de la publicidad de pago de las empresas. Esto ocurrió con CCleaner, una herramienta utilizada para limpiar archivos no deseados. El falso sitio web de CCLeaner dirigía a los usuarios a descargar un virus Redline, que daba a los delincuentes acceso a información confidencial como contraseñas, datos de tarjetas de crédito y criptoinversiones de víctimas desprevenidas. Junto con otros investigadores de seguridad, BleepingComputer descubrió docenas de anuncios maliciosos que redirigían a sitios web falsos. En respuesta, Google dijo que tiene "políticas firmes" contra los anuncios que suplantan marcas y las combate "enérgicamente".
Pues bien, parece que no están luchando contra ellos tan enérgicamente, ya que el problema persiste. El mes pasado, el FBI incluso emitió una alerta sobre anuncios de búsqueda peligrosos, instando al público a utilizar bloqueadores de anuncios. De hecho, los bloqueadores de anuncios, incluida la extensión de navegador AdGuard y la aplicación AdGuard, te ayudan a protegerte de este tipo de amenazas de los delincuentes digitales. Para bloquear la mayoría de los anuncios, tendrás que activar la opción "bloquear anuncios de búsqueda" en tu extensión.
Captura de pantalla: Extensión de navegador AdGuard
Otra vez no... Se robaron los datos personales de 37 millones de clientes de T-Mobile
El gigante de las telecomunicaciones T-Mobile reveló que había sufrido otra filtración de datos, con hackers que robaron datos personales de 37 millones de clientes. Al parecer, los malintencionados aprovecharon un fallo en una de las API de la empresa para acceder a ellos.
El robo se produjo a principios de enero y se contuvo inmediatamente, según T-Mobile. El proveedor de servicios de telecomunicaciones dijo que los hackers obtuvieron acceso a "un conjunto limitado de información de cuentas ", incluidos los nombres, direcciones de facturación, correos electrónicos, fechas de nacimiento y números de cuenta de T-Mobile de los clientes. No se expuso ninguna información de pago ni de identificación gubernamental, aclaró la empresa.
De cualquier manera, la filtración representa un patrón muy preocupante, ya que esta es la octava vez que T-Mobile fue hackeada en 5 años, según TechCrunch. T-Mobile también fue víctima de hackers de Lapsus$, que robaron su código fuente en una serie de ataques en marzo de 2022. El nuevo ataque de hackers, junto con el historial de invasiones a T-Mobile, demuestra que las grandes empresas son tan vulnerables a los ataques como las pequeñas. Cuanto más grande es la empresa, más datos de clientes almacena, lo que la hace más atractiva para los hackers. Para nosotros, los usuarios, esto significa que tenemos que ser muy selectivos sobre los datos que compartimos, las personas con las que los compartimos y cuánto control tenemos sobre ellos.